NUEVA YORK._ Contraponiendo su confesión en
el interrogatorio con la policía y su declaratoria de "no culpable" ayer
miércoles en la Corte Suprema Estatal, un hombre dominicano
identificado como Carlos Díaz, les dijo a los investigadores en el
cuartel que quiso asesinar a su ex esposa, Cathy Zapata, quemándola con
un soplete, pero falló en el intento. Díaz, relató fríamente que estaba
celoso porque su ex mujer había enviado fotos de ella desnuda a otro
hombre, pero también la celaba con Gerson Marchena, el propietario de
una tienda de repuestos de vehículos al que también quiso matar
utilizando la misma antorcha que en ese momento no prendió.
Narró que poco antes de quemar a Zapata fue a una
panadería de a avenida Dickman a comprarle un café. "La quería engañar,
tenía el plan hecho desde la noche anterior", añadió.
Dijo que primero le echó aceite en la cara y luego
le pegó el soplete mientras ella estaba sentada en su carro en el
estacionamiento del supermercado Pathmark de la calle 207 en el Alto
Manhattan.
Díaz de 35 años de edad, indicó que cuando fue a
comprar el café, fue para ganar tiempo y que sus hijos ya estuvieran en
la escuela.
Reconoció que su ex pareja sospechaba algo, por lo
que no perdió más tiempo y le lanzó el aceite en el automóvil. "Le
rocié el aceite para el motor de arranque en la cara y luego le puse el
soplete."
Ella sufrió quemaduras de segundo grado en el cuello y la cara y fue internada en la Unidad para Quemados del hospital Harlem.
El juez Gregory Carro citó a Díaz para el 10 de abril, mientras lo mantiene en la cárcel sin derecho a fianza.
"Algunas partes del pelo de la señora Zapata se quemó hasta el cuero cabelludo", le dijo el fiscal Scott Lee al magistrado.
Díaz sostuvo que cuando le roció también el aceite al propietario de la tienda, el soplete no encendió.
El criminal fue detenido cuando trataba de huir de la escena y confinado en el cuartel 34 donde fue procesado para los cargos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario